La nueva línea de enchapes de INCERPAZ llega a los establecimientos de la marca, en esta ocasión hablamos, por un lado, de los enchapes de forma rectangular y de cara lisa, y por el otro de los enchapes rústicos y de superficie rugosa, ambos productos acabados a base de este material hecho de una combinación de arcilla y restos de arcilla cocida, más agua, que conjuga dureza y maleabilidad a partes iguales y que está pensado para generar un estilo rústico que no deja de lado el cariz de modernidad que guarda su implementación en toda construcción.
Rústico y moderno: ¿Podremos combinar ambos estilos?

Los diseños con esta fusión entre los rústico y lo moderno tienen lo mejor de dos mundos, además de crear proyectos eclécticos y originales.
Aplicar el estilo moderno hoy en día es una solución fácil de realizar que puede ir desde lo country moderno, hasta una decoración que tienda a lo chic e incluso a algo más chill out. En cualquier caso, el estilo rústico sigue imponiéndose hoy día en nuestros diseños y espacios. Y, en este contexto, fusionar lo rústico con lo moderno tiene sus retos, aunque ateniéndose a ciertos parámetros infalibles es más que posible tener un hogar totalmente moderno con interiores rústicos o viceversa: toda mezcla puede habilitar los mejores espacios. Según la estética que se busca, cabe combinar estos dos estilos utilizando elementos en común como los materiales y colores de la decoración.
Jugar con los colores y revestimientos de paredes es una manera eficaz y notoria para convertir un espacio normal en uno rústico, algo que podrás materializar con la línea de enchapes que INCERPAZ propone.
Por lo general, los materiales crudos, naturales y sin recubrimientos son los ideales para dar un toque cálido y hogareño, un concepto que nace de la combinación de colores neutros con acabados tales como el friso texturizado y rugoso, los ladrillos expuestos o las paredes revestidas con piedra. Para mantener una continuidad entre el exterior e interior de tu espacio, rige la decoración de las paredes por los colores que ya presente la fachada y el diseño general de la construcción.
De esta manera, y contando con la materia prima idónea, obtendrás una sinergia virtuosa rústico-moderna que mantendrá colores y materiales con un común denominador.